viernes, mayo 23, 2008

Sueños de robot

Ciudad Ros Casares finaliza la temporada regular de la liga femenina, por segundo año consecutivo, con el triplete: Supercopa, Copa de la Reina y Liga.

Yo he tenido el privilegio -porque lo es- de dirigir al equipo durante el último tramo de la liga. Ayer cenando con unos amigos trataba de explicar lo que he vivido durante estas largas y, al mismo tiempo, ilusionantes semanas. Pero, "cómo explicarte mi vida amigo, si nunca, jamás, jugaste al baloncesto".

Parece un absurdo que un Ingeniero de Telecomunicación acabe entrenando a un equipo profesional de baloncesto. Pero es que los tópicos son muy malos. Nosotros no solo sabemos de conectividad, telemática, control o 3G. Al final no es tan diferente dirigir a un equipo de trabajo, una empresa, o un equipo de baloncesto.

En el baloncesto profesional también existe el benchmarking, el coaching, el brainstorming y se utilizan las últimas tecnologías para mejorar el rendimiento de las jugadoras o el conocimiento del rival. Las reuniones con tu equipo de trabajo no se convocan en la sala de juntas, sino en el vestuario. Los informes de producto o de situación de empresa se convierten en scouting del equipo contrario. Y el director de area no es mas que el capitán del equipo. Se cierra y se inicia el año -aunque aquí se llama temporada- y no hay balances, sino clasificaciones.

Llevo muchos años dedicado al mundo de la empresa. Más todavía viviendo el baloncesto con pasión. En estos momentos no podría concebir mi vida sin alguna de estas dos patas. Cada una de ellas es fundamental para mantener el equilibrio y cada una de ellas me ayuda a mejorar en la otra. Me sorprendo a veces cuando, en un entrenamiento o preparando un partido, se me ocurren ideas utilizadas en mi empresa. Y cuando compito, no sé si lo hago más en el deporte o en el mundo "real".

La temporada ha sido muy larga. El equipo ha participado en tres competiciones: Copa, Liga y Euroliga. No quedan muy lejos los momentos en que jugamos siete partidos en quince días. Viajes, entrenamientos casi sin descanso y sobretodo competición, partidos. Los días pasaban sin saber muy bien si era lunes o domingo. Los aeropuertos parecen todos iguales. No sabes si tienes que hablar en inglés o en español. Los hoteles son todos iguales y no te dan pistas sobre la ciudad o el pais en el que te encuentras. En algunos momentos me paraba a pensar en qué estaba pasando, en lo que estaba viviendo.

Más de una vez me venía a la cabeza la pregunta: "pero, ¿qué haces tú aquí?". Creo que he estado muy cerca de entender al joven Hank en la corte del rey Arturo de Twain o a Sonny el robot de Asimov de "Yo, robot". Al final te das cuenta de que en la vida hay que ser fiel a las pasiones, perseguir los sueños y lograr ser mejor persona haciendo lo que te llena de verdad. Da igual tener sentimientos de persona en un cuerpo de robot o vivir en un mundo alejado de tu época, solo hay que perseguir los sueños.

Fumble

Fumble es una palabra inglesa cuya traducción literal sería algo así como "manejar torpemente". Como siempre, nuestros amigos los ingleses le ponen al verbo un apellido y entonces la expresión cambia de sentido: fumble into, fumble around, etc.

A mi esta expresión me encanta en el mundo del baloncesto. Me parece que es la gran olvidada dentro del argot de nuestro deporte. En nuestro caso fumble se utiliza cuando un jugador está intentando controlar un balón, pero no lo consigue. Durante este corto periodo de tiempo no existen para el ninguna de las violaciones del reglamento como los pasos o los dobles. Esto es porque realmente no tiene control del balón, con lo que no se le puede considerar infractor.

Yo no recuerdo ningún partido en que no se haya producido una situación de estas. Casi siempre se dan por el suelo, en las típicas peleas por un balón en las que incurren dos o más jugadores. Y las más llamativas ocurren cuando un jugador recibe en carrera, en malas condiciones y trata de controlar el balón: fumble en mayúsculas.

Cuando aprendí esta palabra -ahora no recuerdo quién me la explicó- me encantó y desde entonces soy un fumblero convencido.

jueves, mayo 15, 2008

Ganar una liga


Parece que todo ha acabado. Digo "parece" porque hoy llevamos un día de locos, respondiendo a preguntas de la radio, diarios deportivos, acudiendo a eventos y demás.


Imagino que en los próximos días todo se irá normalizando. Eso espero. Lo cierto es que la tensión cansa casi más que correr una maraton. Como yo he corrido muchas os lo puedo asegurar. Necesito tranquilidad, algo que no he olido ni de lejos en las últimas semanas.


Estas semanas que acaban de pasar han supuesto una experiencia única. A los que nos gusta competir y no nos dan miedo los retos, solo podemos andar pensando en qué podemos hacer para poner en marcha la adrenalina. Hoy ya me he descubierto pensando en qué voy a hacer la próxima temporada. Evidentemente me he quitado rápidamente esos pensamientos de la cabeza. Ahora solo cabe descansar, al menos unos días.


Hoy leyendo las crónicas de los diarios me he parada a pensar en lo que ha ocurrido estas semanas: entrenamientos, partidos, viajes, conversaciones de baloncesto, etc. Ha habido un momento que he dudado de que fuera yo el que ha tenido esas vivencias; pero como en los periodicos sale bastante mi nombre, no queda duda de que efectivamente era yo.


Ciudad Ros Casares consigue un nuevo título de liga y yo lo he vivido en el banquillo. ¿Qué puede haber más grande en el baloncesto?. Yo soy consciente de que ganamos cuando quedan 35 segundo para acabar el partido. En ese momento miro al marcador electrónico y veo que es imposible ya que nos cojan. El público estaba haciendo la ola, agitando las banderas, las senyeras enseña de Valencia, gritando de alegría y de fondo la banda de música tocaba algo que no soy capaz de recordar. Probablemente en ese momento ni escuchaba la música.


Con la bocina final, felicitaciones al entrenador contrario (gran temporada). Y felicitaciones a todos los que han hecho posible este título con su trabajo del día a día; la gente que nos veíamos todos los días dos veces, por la mañana y por la tarde. Por último las jugadoras. Cada vez que me fundía en un abrazo con alguna de ellas (la mayorías de veces de puntillas), me daba cuenta de lo que habíamos hecho.


miércoles, mayo 07, 2008

Previa al partido

Hoy es el día de antes del primer partido de la final. Esto es como las elecciones: hoy toca jornada de reflexión. El entrenamiento de hoy realmente es como un repaso general, aunque a ritmo de vals y no de samba.

Antes del entrenamiento tenemos rueda de prensa. Asistiremos la capitana y yo. Elisa es una máquina, no solo en el campo, sino también fuera de él. Siempre sabe las palabras exactas que hay que decir y cómo decirlas. Me impresiona aún más cuando traduce del español al inglés.
De cómo juega o de lo que es capaz de hacer en el campo, no es necesario que os comente nada, la conoceis de sobra.

Cuando en un entrenamiento o partido hay que decir pocas instrucciones en inglés, me apaño bastante bien. El problema son los "discursos" un poco más largos. En ese momento echo mano del diccionario Elisa. ¡Es impresionate!. Yo creo que es aún más educada hablando inglés que español.

Hay momentos en que pienso: "ahora, a ver cómo traduce esto...". ¡Y lo hace!. Además siempre con una educación exquisita. A lo mejor estás cabreado y dices alguna palabra subida de tono o una crítica encubierta a alguna jugadora. Ella siempre es capaz de traducir con la palabra exacta; después de dos o tres improperios y algún que otro gesto ella diría en inglés algo así como: "el entrenador está un poco enfadado y dice que no estamos defendiendo intensamente, que vayamos a las ayudas y que juguemos con más ritmo". De hecho, cuado dices una palabra un poco más fuerte, te mira antes de traducir. Yo aún no he conseguido traducir esa mirada. Al principio creía que era como para pedirme permiso para traducir; ahora pienso que es como una mirada de reproche para que no me exceda con las palabras que digo. ¡Magnífica Elisa!

Solo una cosa de baloncesto. Cuando más complicado es el partido. Cuando más dificil se hace jugar. Cuando te encuentras con el peor ambiente en un campo rival. En ese momento es cuando mejor juega Elisa.

lunes, mayo 05, 2008

Esperando...

Lo peor de las competiciones es el tiempo que hay entre un partido y otro. Es lo que algunos llaman entrenamientos.

En este caso, la verdad es que este tiempo se va a hacer un poco largo. Ganamos las semis en dos partidos y tenemos más tiempo para preparar la final. ¿Más tiempo para preparar?. ¡Si lo que queremos es jugarla!.

Esto es como el estudiante que quiere el día antes estudiar todo un exámen. A nosotros no nos queda nada por estudiar. Estamos preparados.

Hoy por primera vez he recibido llamadas de medios del rival, me refiero la primera vez, estando en Valencia. Normalmente cuando viajas, siempre hay algún medio que te quiere entrevistar. Esta es la primera vez que lo hacen desde la casa del rival. Me ha impresionado la repercusión que tiene esta serie final en Salamanca. La verdad es que es digno de elogio.

Algunos dirán que es que allí no hay deporte de máxima categoría mas que el baloncesto femenino. Vale, estoy de acuerdo, pero es que tenéis que ver cómo viven allí este deporte. I love this game!

De todas formas, solo hay una cosa que tienen que nosotros no tenemos: un pabellón propicio a liar las movidas que ellos arman. Nosotros nunca podremos dar esa imagen de afición desbordada, en nuestro vetusto pabellón de la Fuente de San Luis. Con todos mis respetos, nuestro pabellón nunca parecerá lleno, aunque metamos 3.000 personas -que son los que ellos tienen como afición fiel-.

sábado, mayo 03, 2008

Money in the bank

Las americanas del equipo me tienen anonadado con la forma que tienen de vivir el baloncesto. Todos los días aprendo algo nuevo de ellas (y os aseguro que no lo digo como una expresión hecha, sino como una realidad).

Su sentido de competir es totalmente distinto al nuestro. Para ellas competir significa sencillamente ser las mejores. Ser segundas está bien, pero eso no es competir, es participar.

Me asombra también la jerga que utilizan en nuestro mundo del baloncesto. Tienen expresiones, muchas de ellas imposibles de traducir (de esto tengo muy malas experiencias cuando tengo que traducir en las entrevistas), que dan una riqueza tremenda a nuestro juego.

Una de las que más me llama la atención es la de "money in the bank". La primera vez que lo oi fue en un partido. Una de nuestras americanas, tiradora letal, killer del baloncesto, recibe un balón sola en la línea de 6,25m. Automáticamente, en los pocos segundos (décimas diría yo) que transcurren desde que recibe hasta que arma el brazo, las americanas del banquillo gritan: "bang, bang", como clara onomatopeya de un disparo. La killer gana tres puntos y se gira al banquillo gritando "money in the bank".

¡Claro!, no me queda otra que preguntar qué significa eso (evidentemente al acabar el partido). Es simplemente genial, maravilloso, casi tangible. ¿Dónde está el dinero más seguro que en el banco?. ¿Has una inversión más segura que dejar el dinero en el banco?

Una jugadora, una killer, la tiradora del equipo sola en la línea de 6,25m con el balón en sus manos, solo tiene que disparar para meter en dinero en el banco. Es un valor seguro, un tiro que no va a fallar. Mete el triple y encima se regodea con él.

Me ha gustado tanto que lo uso cuando siento a una de las americanas y ha hecho un buen partido: "Money in the bank", siéntate que ahora vienen los brokers con tu dinero a sacar pingües beneficios.

A la final por la puerta grande

El partido de ayer no fue tan bueno como el primero de la serie, pero el resultado no deja lugar a la duda: San José León 59 -88 Ciudad Ros Casares, esto es, lo que se conoce vulgarmente como 29 puntos de diferencia.

Es curioso cómo los medios se hacen eco de la situación del equipo, del proceso que sigue la fase de eliminatoria por el título, de cómo está una jugadora u otra, etc. La mañana del partido fui entrevistado por una emisora deportiva nacional y la conversación no tuvo ningún desperdicio.

Inicialmente las preguntas de rigor "¿esperas un partido como el de Valencia?", "¿cómo está el parte de bajas?", etc. Sin embargo, de ahí hasta el final, nada de lo cotidiano. El entrevistador empieza preguntando por dónde estamos alojados y acabamos hablando sobre lo bonito que es el campo leonés, tan verde y tan frondoso.

En primer lugar, situación de fuera de juego para mí, a la espera de ver cuál es el siguiente hilo de la entrevista. Al seguir con la charla me voy metiendo en faena y llego a encontrarme muy cómodo. Era como una conversación entre colegas: "bueno, ¿y son bonitas las vistas desde donde estais?", "no dejéis de ir a dar una vuelta por la ciudad". De ahí a casi suplicar que no tuvieramos la misma contundencia que en el primer partido, solo un paso.

No tengo muy claro el impacto que pudiera tener la entrevista en los seguidores del programa de radio, pero lo que sí tengo claro es que es la primera entrevista en la que me he encontrado claramente cómodo.

Gracias, colega presentador

viernes, mayo 02, 2008

Dia de partido

Ya estamos por León. Nos hemos alojado lejísimos de la ciudad. Algunos dicen que es para concentranos más y no estar en el tumulto de la gente que abarrota esta bonita ciudad durante el puente del primero de mayo. La realidad es que, justamente por culpa del puente, todos los hoteles están abarrotados.

Como siempre el desayuno, uno de los mejores momentos del día. Esta vez nos hemos encontrado con algunas sorpresas gastronómicas interesantes. Pero también es importante ver las caras de la gente cuando se van levantando. Más todavía cuando el drama de un virus que pudiera afectar a varias jugadoras (y alguno que otro del cuerpo técnico), se cernía sobre nosotros. Al final, falsa alarma y todo queda en una mera conincidencia: una que se marea por el avión, otra que está un poco resfriada, etc.

Ahora nos toca entrenar (hoy sí) y luego todo ese tiempo que hay desde que llegamos al hotel hasta que toca sesión de video antes del partido. Normalmente, cuando nos alojamos en la ciudad, solemos hacer turismo. Bueno, si se puede llamar turismo a lo que hacemos. Se trata de dar un paseito, estirar las piernas, ver algo de la ciudad y comprobar eso que dicen que en Europa todo el mundo habla inglés: ¿quién se inventaría eso?.

Hoy tenemos el añadido de que el partido puede suponer que nos ganemos dos días de descanso. ¡No quiero ni pensarlo!. ¡A por las leonas!

jueves, mayo 01, 2008

Ciudad Ros Casares 90- 52 San José León


Sinceramente no lo hubiera esperado. Es posiblemente el partido más completo del equipo en lo que llevamos de temporada.


Pero no me quedaré en la típica crónica del partido, que para eso ya están los diarios y los periodistas, que lo hacen muy bien.


El día empezó como siempre: video y entrenamiento matutino. Al entrar al vestuario veo unas rosas en una botellita con agua. Me sorprendo y las jugadoras me recuerdan que esas flores llevan allí varios días. Al principio pensé: "¡qué poco observador soy!". Pero claro es que no suelo entrar en el vestuario. Tenemos una especie de sala antes de la zona donde las jugadoras se cambian. Esta zona es donde trabaja el Médico y la Fisio. Es allí donde sí suelo entrar a que me den el "parte médico", o a hablar con alguna jugadora antes de un entreno.


Normalmente los partidos no son tan tarde. Esta vez era a las 20:30h. Eso quiere decir que tienes que esperar toda la tarde, sin nada que hacer hasta la hora del partido. Si hubiera sido por mí, cuando llegó el León por la mañana luego de nuestro entrenamiento, lo hubiera acordado con ellos y hubiera jugado el partido. La lástima es que se lo hubieran perdido las cerca de 2.000 personas que acudieron por la tarde al pabellón.


Si se hubiera inventado un "ansiometro" (que sería la máquina que mide el nivel de ansiedad), creo que yo lo habría reventado ayer. Tenía ganas de play off. Es curioso, por la mañana tienes ganas de que empiece y, cuando estás metido en el ajo, no tienes ganas de que acabe.


Pero como las eliminatorias por el título no dan descanso, ya estamos con la maleta preparada para salir esta misma tarde para León. Viaje en avión, en charter, lo que normalmente se conoce como "mosquito". Tendré que hablar algún día de mis experiencias con el mosquito. Hoy hace viento, así que el viaje promete ser movidito -en todos los sentidos-. Menos mal que las agradables conversaciones de los viajes (qué curioso, casi siempre hablamos de todo, menos de basket), amortiguarán las malas sensaciones del avión.


¡Hasta la vuelta!